La liga BBVA ha pasado a un segundo plano esta semana debido a acontecimientos como la final de la NBA, Roland Garros,, el Gran Premio de Canadá, la Eurocopa y los incansables culebrones de verano, véase Cristiano Ronaldo, Dani Alves,… También aquí en Málaga ha quedado el fútbol en un olvido momentáneo después de la destitución del técnico del Unicaja Sergio Escariolo. Pero para mí, al igual que para muchos malaguistas, lo que ha quedado en un segundo plano ha sido todo menos el Málaga C. F.
Es difícil de explicar esta situación para quien no la ha vivido nunca: te rondan mil ideas por la cabeza, por un momento eres el más optimista del mundo y a los cinco minutos lo ves todo imposible. Yo incluso llevo desde el martes sin poder dormir bién, y mis ojeras son prueba de ello.
Van pasando los días y te das cuenta de que la temporada no era infinita, que acaba, y que dentro de unos días estaremos en la gloria o en el infierno. Recuerda que al Málaga se le hará casi imposible permanecer en segunda si no se consigue el ascenso, ya que la viabilidad económica del club pasa por jugar el año próximo en la máxima categoría. No quiero ni pensar que pueda pasar lo del año pasado con el Ciudad de Murcia y nos volvamos a quedar sin equipo. Porque, aunque soy de una generación que conoció el fútbol cuando el Málaga C. F. rodaba por los campos de tercera y crecí siendo del Real Madrid, cuando me enteré de la existencia del equipo de mi ciudad me enamoré de él como lo estoy de mi tierra y dejé al equipo merengue en ese segundo plano en el que ahora nos dejan a nosotros. Y es que es muy fácil ser del Real Madrid, o del Barcelona… lo realmente duro, a la par que bonito, es sufrir por tu club como sufrimos nosotros, y eso ningún hincha culé ni merengue sabrá jamás lo que significa.
Duerme y relájate socio.
Está claro que un club como el Málaga debe estar en la elite para su salud económica. La verdad es que os jugáis mucho. El lado bueno es que dependéis de vosotros.
Un abrazo, amigo.