Con Hidalgo basta. En el club ya se trabaja para que lo ocurrido con Hidalgo no se vuelva a repetir, y para ello ya han puesto en marcha las negociaciones de ampliaciones de contrato y sueldo con varios futbolistas claves para el equipo.
El primero de los que acaba contrato es Iñaki Goitia, un portero jóven que ha demostrado con creces tener cualidades de sobra para ser titular en primera, una garantía bajo los palos. El club costasoleño tiene conocimiento de que interesa a algunos de los equipos más representativos del país vasco, y ya se baraja con su representante una ampliación de su contrato y de la ficha a percibir. Goitia firmaría una cláusula sensiblemente mayor de la que cobra actualmente, con opción de doblarla si juega un número determinado de partidos.
Jesús Gámez es otro de los elegidos para tocar su contrato. El de Fuengirola, que es actualmente uno de los peores pagados de la plantilla, es pretendido por equipos como el Sevilla. A Gámez se le propondrá una amplicación de contrato, que ya es de dos años, en vista de la juventud y la proyección del futbolista.
Por otro lado está Nabil Baha, pretendido por varios clubes franceses. El marroquí ha expresado abiertamente sus deseos de quedarse en Málaga y de triunfar con el club.
Sin duda son tres jugadores consolidados en el equipo, claves la próxima temporada para que el Málaga sea un club competitivo en la máxima categoría del fútbol español.
