Serguei Brovtsyn para As.com

«Son partidos que sueñas». La frase salió ayer de boca de Miguel Ángel, pero la dijo Málaga entera. La ciudad, en una nube, vibra ya, nerviosa, ante uno de los partidos de la temporada. El Barcelona aterriza hoy a las 19:30 en la Costa del Sol y remueve la imaginación del malaguismo. Por eso, después de años enteros, se llenará La Rosaleda y Martiricos se ahogará en el blanquiazul. Borrachera de afición, de sentimiento y de fútbol. Y lo mejor es que el equipo por el que vela Antonio Tapia tiene fe en obrar su enésimo milagro. Arrancarle en la pelea algunos pelos al ogro azulgrana, esquivar a la apisonadora y enterrar debajo del estadio malaguista algún que otro punto. El objetivo, que en el inicio de Liga parecería poco menos que una quimera, es hoy una ilusión con base de hormigón. El Málaga lleva una racha de cuatro victorias consecutivas en el campeonato y cinco partidos invicto seguidos si se le suma el partido del pasado miércoles en Copa ante el Mallorca. Argumentos para completar la frase inicial de Miguel Ángel: «… El Barça va a sufrir aquí porque seremos un rival incómodo. En Sevilla ya demostramos nuestras armas y debemos repetirlo. Está claro que aquí no se pasea nadie. Jugamos en casa y debe ser nuestra baza. La Rosaleda va a estar llena y tiene que ser algo espectacular». Declaración de intenciones, de guerra.
El vestuario blanquiazul rebosa confianza. «Si había algún momento para plantarle cara al Barcelona, es ahora. Estamos en un momento inmejorable, deportiva y anímicamente», proclama al unísono la plantilla de Tapia. Y le sigue la afición, que hace cola para pillar un cachito del mejor momento del conjunto malaguista en los últimos cinco años. Se prevé que para el día del partido queden menos de 1.000 entradas en las taquillas. Lo merece la ocasión, lo merece el Málaga.

Guardiola, el mejor debutante desde… ¡Tapia!
En los banquillos de La Rosaleda se encuentran dos hazañas, del presente y del pasado. Pep Guardiola ha igualado a Antonio Tapia en su racha como entrenador debutante en Primera División y mañana intentará batirle. El récord del técnico baenés data de la temporada 2004-05, cuando se hizo cargo del Málaga y sumó 19 puntos en ocho partidos. Seis victorias, un empate y una derrota que sirvieron para establecer una marca que ha repetido en el inicio de la presente temporada el nuevo entrenador azulgrana. El Barcelona, tras ocho jornadas de Liga, también suma 19 puntos con el mismo balance de resultados. Las dos rachas se encuentran atravesando las barreras del tiempo y Tapia será el encargado de hacer que el azulgrana no supere el registro que él mismo estableció.