Un empresario malagueño, Fernando Puche, que tomó las riendas de la entidad malaguista en el año 1997 fue el gran artífice para que el equipo volviera a Segunda División por primera vez tras la desaparición del C.D. Málaga.
El paso fue breve. En la temporada del estreno, el Málaga lograba el ascenso a la máxima categoría del fútbol español realizando un brillante campeonato en el que acabó como campeón de Segunda.
Jugadores como Edgar, Rafa, Bravo, Agostinho, Movilla, Zárate, De los Santos, Txomin Larrainzar, Valcarce, o al que muchos niños de entonces imitamos en el patio del colegio al celebrar los goles: La gaviota Catanha; lograron la gesta. Todos dirigidos por el míster Joaquín Peiró.
El partido del ascenso fue un Málaga – Albacete en el que los andaluces empezaron perdiendo con un gol de José Juan Luque, pero que pronto remontaron gracias a los goles de Bravo y Edgar. Luego anotaría el tercero Agostinho, y un segundo gol del Albacete pondría la emoción hasta el final. Tras el pitido de Undiano Mallenco se certificaba el ascenso.
En la retina de todos quedará el abrazo de Edgar y Rafa en el círculo central celebrando el gol del angoleño.
Por recuerdos como éste merecen la pena mil descensos.