A falta de horas para la comunicación oficial del despido de Husillos, Arnau ya ha dado su visto bueno para sustituirle como director deportivo de la entidad.
Renovar toda la dirección deportiva del club. Ese parece ser el objetivo más inmediato de los dirigentes malaguistas.
Tras la salida de Vicente Casado de la directiva malaguista, el próximo en caer será Mario Armando Husillos. Posiblemente se haya ganado su despido con la extensa sucesión de fichajes improductivos y su claro enfrentamiento de pareceres con el entrenador Javi Gracia. Y es que la lista de incorporaciones incompetentes llegadas de la mano de Husillos se hace ya casi infinita. Véase Tissone, Pedro Morales, Flavio, Bobley Anderson o Pawlowski.
Llega Arnau, un hombre que ha sido toda una institución como portero en el Málaga. Y lo hace dejando vacante su puesto de preparador de las categorías inferiores.
Lo que importa ahora es que el ex meta catalán traiga varios ases bajo la manga y demuestre sus relaciones con clubes como el Fútbol Club Barcelona, logrando por fin cesiones de equipos grandes ante las que siempre se nos adelantan todos los clubes.
Con el relevo en la dirección deportiva a punto, sólo queda que lleguen los resultados en el verde y que el Málaga pueda iniciar una nueva remontada que nos de la tan ansiada tranquilidad.