La hora de Izan Merino.
Ante la falta de efectivos en esa posición, el canterano se perfila como opción primordial para la titularidad en el estreno liguero.
Comienza la liga y ya vemos en qué posiciones tendrá que estrujarse los sesos el míster. El Málaga viajará a Galicia para medirse al Racing de Ferrol con varias bajas.
Moussa, sigue lesionado sin poder entrenar, con lo que no irá convocado. Por su parte, Haitam y Ramón, siguen recuperándose y poniéndose a punto y aún no pueden debutar. Otro efectivo que llama la atención es Luismi Sánchez. El club alegó que el jugador venía con poco descanso y estrés muscular, y debía ir con más calma en su recuperación esta pretemporada. Sin embargo, lleva ya más de un mes en el equipo y aún no está listo.
Preocupa. Sobre todo por el historial de lesiones del futbolista andaluz. La última lesión conocida, fue el pasado mes de Abril. Aún formaba parte de la plantilla del Oviedo, y sufrió una meniscopatía que se quedó en lesión leve, pero que rozó algo más grave en su rodilla. Estaría algo menos de un mes de baja para luego volver a contar par el Oviedo en la recta final de la campaña. Recordemos que el equipo asturiano estuvo disputando playoffs de ascenso a Primera hasta el final, por lo que fue una temporada larga para los azulones.
En todo caso, el que ni si quiera vaya convocado indica que aún no está listo ni para contar con minutos, por pocos que sean.
Con este panorama, a Pellicer se le queda un plan para el centro del campo en el que la baza más atractiva para la posición de pivote que acompañe a Manu Molina sería Izan Merino. Bien es cierto que Juanpe ha hecho buena pretemporada y se le ve más acertado y en forma que la pasada temporada con las lesiones y recuperaciones. Por su parte, Sangalli parece un poco menos inspirado (por lo visto en los amistosos) pero también podría ser una opción de corte más ofensivo.
En todo caso, este inicio liguero puede ser una gran ocasión para Izan Merino. El joven jugador podría cuajar buenas actuaciones en esa posición que le afiancen en la titularidad. Bien sabemos que a Pellicer no le tiembla el pulso cuando tiene que dar responsabilidad a los más jóvenes.