Decepción, de nuevo. Ese puede ser el mejor resumen para lo ocurrido este fin de semana en la Rosaleda. Mal partido elegí para ser el último de este año que presencio en el estadio, ya que por motivos laborales no puedo asistir a los otros dos.Todo indicaba que viviríamos una tarde memorable, una tarde de ascenso, una tarde como las que pocos recuerdan ya por aquí: Los actos previos, el recibimiento al autobús de la plantilla con vengalas incluidas cortesía del frente bokerón, el buén tiempo, y sobre todo el buén aspecto que presenciaba la grada a las 17:00 avivada por los aspavientos que jugadores como Hidalgo hacían en las vueltas previas de calentamiento. En definitiva, las 24.000 personas que nos dimos cita en el estadio éramos los más optimistasdel mundo en aquellos instantes, y se confirmaban nuestros buenos presagios cuando poco después del comienzo ya ganábamos, y se veía al equipo con hambre de más. «Hoy vemos una manita» recuerdo que le decía a mi cuñado cuando Hélder firmaba el 3-1 justo después del susto que nos dió un desaparecido Hércules acortando diferencias. Y nos fuímos al descanso.
Comienza la segunda parte, y todos estábamos espectantes por ver lo que hacían nuestros jugadores en esta segunda mitad, aunque tengo que reconocer que una parte de mí temía un segundo gol alicantino, lo que nos metería el miedo en el cuerpo. Pero no, el Málaga hizo el cuarto y por unos instantes éramos los más felices, instantes que tardamos en darnos cuenta de que el gol estaba anulado por fuera de juego, aunque en la radio opinaban lo contrario. Y del 4-1 pasamos al 3-2 en un gol en el que la defensa malacitana aún asumía la acción anterior. Entonces, el Hércules fué otro, y empezaron a vapulear al Málaga mientras que los locales apenas olían el balón, «lo que hacen 90.000 euros» comentábamos nosotros cuando nos dejó boquiabiertos el tercer gol del Hércules. Empate. Empezamos desde 0 pensaba yo. Pero no era así, el Málaga era un equipo roto, y Muñiz, después de un cambio defensivo previo al 3-3 quitando a Rosado por Apoño, hizo salir a Salva para echar el resto. El Málaga estaba volcado, y fué a lacontra donde el Hércules encontró la llave para hacer efectiva la prima prometida desde San Sebastián. De pronto, cuando ya veíamos que pasaban los minutos y no nos poníamos por delante el árbitro pita un penalty injusto, ya que Hélder tocó balón, visto desde mi perspectiva, y tras sus protestas «¡Qué pitas!» le dijo Helder; el árbitro le mostró su segunda amarilla y a la calle. Gol y 3-4. Todos estábamos incrédulos (en este momento recuerdo que se me vino a la cabeza una remontada del Málaga en el año 99 al Mérida cuando perdía por 1-3 en la Rosaleda. Esta vez era al revés), y el Málaga se volcó aún más, dejando atrás un regalo en forma de huecos para los delanteros alicantinos, que a placer hicieron el quinto y el sexto ante la mirada de los pocos aficionados que aún seguíamos allí. Luego Hidalgo hizo el cuarto para el Málaga para completar un amargo hat-trick. Muchos de los ilusionados con el ascenso han desistido en sus esfuerzos de animar tras ver la cara tan triste que está dando el equipo en el tramo final de la temporada, pero hay que animar, y si hay que morir, se morirá con orgullo, luchando.
Quiero decirte dos cosas: Que bueno que has vuelto y la otra que no os descuideis que al fianl os pasa como el Xerez
un saludo
La verdad es que no entiendo cómo habéis podido tirar un ascenso que lo teniais en la mano. Debe ser frustrante.
Un abrazo, amigo.
Amigo, estais jugando con fuego y os podeis terminar quemando.
Un abrazo
si con 90.000 euros OS VIOLAN de esa manera ya sabeis lo que teneis que (volver) a hacer, primar a los rivales de los demas.
tu sabes si el malaga esta primando a alguien????? porque sabes mucho de otros…
@ diego
Hombre, yo llevo toda la temporada pensando el el Xerez de los últimos dos años, si nos ocurre lo mismo no me extrañaría nada.
@ la quinta
Nadie lo entiende, pero hay que apoyarles hasta el final.
@ alejandro
Pues sí, desgraciadamente llevas razón.
@ anonimo
Bueno, el Málaga no tiene dinero para primar, y de tenerlo, no sé si lo haría. Lo que sí es cierto es que ya han salido varias declaraciones de jugadores a la luz, véase el caso de Dani López del Salamanca, que reconocen haber sido primados. Lo que sí es cierto y quiero que quede claro es que esto NO ES NINGUNA EXCUSA para justificar la derrota del Málaga, ya que no hay mejor prima que el ascenso.