Foto: Málaga Hoy
Hoy se ha presentado la primera incorporación del Málaga para la temporada 2022-23, regresa a su ciudad el guardameta trabuqueño Manolo Reina a sus 37 años tras sus periplos en el Levante y el Real Mallorca. Y tras su presentación, ha aprovechado el director deportivo para por fin dar explicaciones y contestar a las preguntas que la prensa ha realizado tanto sobre el balance de la temporada pasada como de las expectativas de la temporada que está por empezar.
“Se está contando con figuras que pueden actuar de pilares, de sostén, de experiencia y de método, dar empaque y proporcionar una cultura de club”
Antes de entrar de lleno en lo que ha dicho Manolo Gaspar, cabe destacar que desde que ha terminado esta nefasta temporada, se está contando con figuras que pueden actuar de pilares, de sostén, de experiencia y de método, dar empaque y proporcionar una cultura de club. Son nombres como el de Antonio Tapia, Toni Mengual, que se suman al del míster, Pablo Guede. Como continuación a éstos, dentro de la plantilla se puede considerar también al meta recién presentado, Manolo Reina.
“Ha sido un año horroroso”
Manolo Gaspar empezaba la rueda de prensa haciendo un ejercicio de autocrítica que ya se consideraba necesario y correcto. Ha dado su punto de vista explicativo sobre por qué se diseñó la plantilla de la temporada pasada de esa forma, tanto factores de juego como factores económicos. Ante esto, queda claro que se ha aprendido a base de palos que un jugador no solo es un nombre. Es muy importante estudiar a la persona, al profesional con todos sus matices. No queremos más “antoñines”.
Menos convincente ha sido la explicación del por qué de la salida de Paulino a precio irrisorio (clausula de 50.000 €). Explicaba Manolo que llegó a Málaga con esas condiciones, dando a entender que si se le imponía una cláusula alta, no habría sido fichado.
Por su parte, sobre Febas, indicó que no hay dinero para hacerse con su ficha. Cierra así la puerta a su compra al Mallorca. Otra opción será que el futbolista quiera recalar en el Málaga al quedar libre, pero parece complicado teniendo en cuenta su sueldo actual que supera el millón de euros y su calidad.
Tras esto, el director deportivo malaguista ha sido tajante: “El objetivo no puede ser la permanencia”. Claro está que decir esto teniendo la incertidumbre de no saber qué plantilla se va a confeccionar aún, debido a las dificultades del mercado y la posición del Málaga en este sentido, es algo atrevido. Si como él mismo dice, esos diez nombres que ilusionan con los que está negociando acaban llegando, es obvio que el objetivo no es la permanencia. Pero si al final el mercado dice que no, y el Málaga no logra reforzarse con garantías, probablemente habría que conformarse con no descender un año más.
En todo caso, haciendo las cosas bien y con trabajo, esfuerzo y profesionalidad, vendrán tiempos mejores para los malaguistas.